El uso excesivo de bicarbonato de sodio puede irritar las encías y provocar inflamación. Esta irritación puede empeorar si se utiliza con demasiada frecuencia o se aplica con fuerza al cepillarse los dientes.
Además, si sufres de sensibilidad dental o padeces enfermedades bucodentales, puede que el uso de bicarbonato de sodio empeore los síntomas.